Para entender el porqué, os cuento que el transiberiano no es más que una ruta unida por ferrocarril entre Moscú y Vladivostok (cerca de la frontera con Corea del Norte). A la altura de Ulan Ude, en la frontera con Mongolia, esta ruta, por decirlo de alguna manera se bifurca en dos, una que continúa hasta Vladivostok y la otra que discurre por Mongolia hasta Pekín (no es la única división de dicha ruta, hay más durante el trayecto hasta Vladivostok).
Por tanto, el transiberiano (o el transmongoliano en su bifurcación), es una ruta que es recorrida por gran número de trenes con itinerarios y paradas muy diferentes. No te puedes comprar un billete por toda la ruta si quieres ir haciendo paradas entre unas ciudades y otras, si no que para cada trayecto que quieras hacer es necesario comprarse un billete (a no ser que hagas el trayecto entre Moscú y Vladivostok sin parar, lo cual no es muy aconsejable claro). Como curiosidad, el número del tren te da una idea de cuantas paradas va haciendo y, por tanto, como es de rápido. Cuanto más cercano a 0 más rápido (el número 2, conocido como Rossiya, que hace la ruta Moscú – Vladivostok es el más rápido), y cuanto más se acerque el número del tren a 1.000 más lento.
Por tanto, es de suponer que toda la malgama de rutas y trenes que cubren el transporte de pasajeros entre las ciudades rusas, hace muy difícil encontrarte con extranjeros en dicho recorrido, pero que una vez en la frontera con Mongolia, los rusos que deben cruzarla deben ser entre pocos y ninguno, por lo que solo hay un tren diario (más uno un poco más rápido que solo circula semanalmente), y es por lo que por fin, nos concentramos aquí, como en un embudo, los extranjeros que estamos cruzando la frontera por turismo.
Y ya que no sé porqué me he puesto a hablar sobre el tren, unos consejos. En la página www.rzd.ru podéis ver los horarios de los trenes en ruso, para poder hacerlo usar el siguiente manual . Es muy útil consultar el horario y disponibilidad antes de ir a la ventanilla a comprarlo, de hecho, nosotros íbamos con el pantallazo del billete que queríamos en ruso y lo mostrábamos por la ventanilla, siendo mucho más eficaz que intentar a través del diccionario ruso-spanish explicar que es lo que quieres, que al final lo consigues, pero tras un largo proceso de desgaste en el que por lo general la señora de la ventanilla en un 50% de las veces hará lo mínimo por intentar entenderte.
Para cada billete por lo general (y si lo compras con tiempo) puedes elegir entre tres clases. Primera clase, con un compartimento con dos literas, segunda clase (kupe) con un compartimento con cuatro literas, y tercera clase, con 50 literas en un vagón, más los animales que acompañen a dichas personas que pueden ser de tipo muy variado. Nosotros hemos hecho todos los viajes en segunda clase, a excepción de un tramo que eran cinco horas y lo hicimos en tercera (el que os comenté en mi entrada al blog: Despertando en Siberia), y para nosotros, demasiado “ruso” como para repetir. Gasto aproximado de los billetes hasta Ulan-Bator: 420 €.
Por último, por si alguno se anima , os diré que como paradas imprescindibles, Kazán e Irkutsk (Lago Baikal), y como aconsejables, Nizhny Nóvgorod, Tomsk y Krasnoiarsk (ciudad en la que no hemos estado por falta de tiempo, ya que dentro de una hora cruzamos la frontera y dentro de 10 expira nuestra visado, pero de la que todo el mundo nos ha hablado positivamente).
Dasvedania Russia !!!
que pasa gulliver. Me parto con tus entradas. La foto tuya en los zancos saltarines es la ostia. Como va todo? Te echamos de menos cabroncete...un abrazo de boqueron matutino con forma de pepino que por delante echa gotas y por detras le cuelgan dos pelotas...el tito isma
ResponderEliminarVeo pocas referencias al material antidisturbios en las diferentes ciudades. Pasarlo bien, y a ver si os conectais a Skipe.
ResponderEliminarBlackHole